Por Alejandro Graue/TMC
En un partido aburrido y de muy chato desarrollo, Tigre volvió a ganar en Victoria, esta vez frente a Olimpo de Bahía Blanca. Repitiendo equipo casi completo (Javi García estuvo indispuesto y en su lugar retornó el tan querido Dani Islas) el Matador venció por 1 a 0.
El partido empezó con un Olimpo estaqueado en su terreno, observando atento lo que Tigre decidía hacer. Y al Matador no se le caía una idea. Teniendo toda la potestad del balón y claramente la más amplia posibilidad de ganar, al equipo del Vasco Arruabarrena se le durmieron las neuronas y estuvieron más imprecisos que nunca. Las jugadas colectivas que intentaba hilvanar el Matador se desarmaban siempre con malos pases o pelotazos largos que no llegaban a destino. La sensación era que Tigre podía golear pero que esa misma presión terminaba por entorpecer cada movimiento de los jugadores. Hasta que llegó el primer error del árbitro Patricio Loustau. O mejor dicho, del juez de línea. Una pelota cruzada cayó en los pies del Patito Galmarini (de ENORME partido) quien definió magistralmente para abrir el marcador. Gol, golazo, por fin Tigre lograba romper con la modorra y el aburrimiento, y aunque el tanto fue convalidado, debió ser anulado por un offside de 2 metros. Una vergüenza.
A partir de ahí Olimpo perdió la tranquilidad, y sin embargo, increíblemente, quien lo pagó fue Tigre. En una jugada completamente intrascendente, un lateral para Olimpo, Loustau vio un golpe de Echeverría hacia un jugador de Olimpo y, por supuesto, sacó roja. Una expulsión increíble que deberá explicarse en la semana. Y como siempre, a Tigre se le hizo cuesta arriba cuando todo debía ser más tranquilo.
Desde ahí el partido fue un chiste, una excusa, una ilusa mentira para un Olimpo que “buscó” pero que jamás hizo nada serio, y para un Tigre que controló torpemente la ventaja y jugó a la contra pero siempre con imprecisiones.
Lo mejor llegó al final, cuando llegó el segundo gol de Tigre. ¡Pero no! Loustau decidió anularlo para cobrar una falta previa (que era último recurso) y expulsar al jugador de Olimpo que cometió la falta. Así que por precoz, por pitar antes de ver el desenlace de la jugada, Loustau le anuló un gol legítimo a Tigre y le expulsó un jugador a Olimpo. ¿Compensación por regalar el primer tanto del partido? Quién sabe... pero eso pareció ser lo que manejó el cerebro del árbitro durante todo el encuentro.
Patricio Loustau tuvo un encuentro patético, en el que regaló todo para Olimpo tras volver del entretiempo (¿habrá visto el gol que regaló para Tigre?) y por ejemplo, sancionó foul en ataque cada vez que el Chino Luna tomó la pelota. A fin de cuentas, cabe resaltar que se volvió a ganar, que la cancha explotó, que se suman 6 puntos de oro, que se alcanzó la punta, se salió del descenso directo y se quedó a un punto sólo de San Lorenzo. Además, creo que un jugador que se merecía el gol más que cualquier otro, era el Patito Galmarini, que como siempre fue puro corazón y entrega. Para resaltar nuevamente la gigantesca labor de Orban, que ya está para la selección sin lugar a dudas. Buen partido de Dani Islas, que fue estúpidamente amonestado por “demorar”, mientras que Ibañez, arquero de Olimpo, jamás recibió la amarilla por hacer lo mismo durante todo el primer tiempo.
GRACIAS, TIGRE POR RESURGIR!!!!!! A POR TODOS!!!!! A POR LA PERMANENCIA!!!!