El Bicho sufrió el síndrome sapo Pepe: iba a subir a la cima y...¡te vas a marear! ¡te vas a marearrrrr! Nobleza obliga, el 1 a 1 fue un baño de realidad para un equipo que, por su bien, debe asumir que no le da para pelear un campeonato. Tigre le hizo un bien al fútbol. Porque ni con un penal inventado, ni con la doble ejecución de Ortigoza (por ahí, si Islas lo atajaba, se volvía a ejecutar una y otra vez), ni con el gol anulado al Matador, ni... ¡¿cómo Scotti no se avivó de meter otro gol con la mano?! Ni con todo eso, Argentinos nos ganó. Chau careta, chau candidato de ficción. ¿Autocrítica? Mucha. Tigre juega mal. O directamente, no juega. No gana. No luce. Harta. Entristece. Y no para de regalar puntos...
PD: los hinchas de Argentinos deben saber que no es tan complicado llegar a Victoria. Lo es, clado, si no fuiste nunca. ¿Viste dónde canta el sapo Pepe? De ahí, seguí por la Avenida del Libertador hacia Tigre...
jorgelopez@ole.com.ar
Fuente:www.ole.clarin.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario