¿Dónde hay un gol?

ejones@ole.com.ar 26-09-2010 Tigre y Racing aportaron otro 0-0 a la fecha con menos goles en lo que va del torneo. El local le metió mucho rigor y controló a los talentosos de Racing, como Moreno, que no tuvo espacios. Al menos sumaron...

La ecuación a la vista: Giovanni+pelota=seis piernas de Tigre al acecho. Fórmula made in Caruso Lombardi. Había que frenar al colombiano, cortarle el circuito de juego a Racing, sea cual fuere el precio. En el revoleo, el Matador la sacó barata con un Beligoy que terminó dándole más amarillas a los de Russo (tres) que a los locales (dos). Pérez y Galmarini pudieron ir a la guillotina más de una vez, pero salieron absueltos. Y el pobre de Moreno sintió el rigor. De ahí, bajo ese concepto, se jugó en Victoria. Un Tigre demostrando rudeza y un Racing que presionó bien pero tuvo siempre contenidos a su enganche y a Toranzo. Quemados los fusibles de la Academia, el Matador -con un Román Martínez desaparecido- dejó la creación en manos de Telechea, quien probó en dos oportunidades al arco de De Olivera. En una el arquero respondió bien y en la otra, el travesaño le dio una manito. Russo, además de demorar en los cambios, eligió no cambiar el esquema. Con Lugüercio tan solito, producto de la exhaustiva marca sobre G10, se caía de maduro que Racing necesitaba otro delantero. Pero el técnico hizo ingresar a Hauche por el Payaso. Al cambiar punta por punta, el trámite de su equipo seguía igual: poca profundidad, poca llegada, pocas ideas, poca movilidad... La imagen del final hizo arder las pupilas. Tigre tuvo un poco más de tranquilidad con Castaño repartiendo el juego y Morales haciéndola correr. ¿Racing? Un disparo de Hauche que contuvo Ardente. Un 0-0 que comenzó a enamorar en el ocaso del segundo tiempo y que pareció un negocio redondo. Pero de réditos, mejor ni hablar.

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