El Matador, que no gana desde la primera fecha, estuvo dos veces en ventaja con goles de Giménez (PT 14m) y Luna (ST 1m), pero el Decano, que se sacó la mufa tras ocho jornadas, logró la victoria 4-2 por intermedio de Pereyra (PT 16m y ST 12m), Blanco en contra (ST 9m) y Gigliotti (ST 35m). La visita jugó con diez desde el final del primer tiempo por la expulsión de Giménez.
Un verdadero partidazo protagonizaron este sábado en Tucumán dos equipos que llegaban muy necesitados de puntos. Y festejó Atlético después de una sequía de ocho fechas con su 4-2 sobre un Tigre que sólo ganó en la primera y que se hunde cada vez más. El juego local siempre fue superior. Con el empuje de Sebastián Longo y una gran actuación de Luis Rodríguez, los tucumanos complicaron en demasía al fondo del Matador, tanto que en el primer minuto Daniel Islas debió sacarle una chilena a quemarropa a Matías Villavicencio. Pero a los cuatro, en lo que sería su única llegada del período, un centro desde la derecha fue peinado por Leandro Lázzaro y Matías Giménez, en posición dudosa, empujó el balón por el segundo palo. Pese al cachetazo, el Decano trató de no desesperarse en los instantes siguientes. Rodríguez amenazó con un tiro libre desde la izquierda que estrelló en el primer palo y, a los 16, intentó otro que obligó al rebote a Daniel Islas para que Juan Pablo Pereyra, con su potencia goleadora, lo ajusticiara desde sus narices.Después, Islas también tuvo que trabajar frente a otra arremetida de Pereyra que logró morderle Rodolfo Arruabarrena y ante un cabezazo de Rodríguez. Y, entre los 43 y los 45 minutos, un Tigre que ya caminaba por la cornisa rifó su futuro con las dos amonestaciones que recibió Giménez, la segunda por una tonta mano intencional. No obstante, el segundo período comenzó como su antecesor: con el conjunto de Diego Cagna poniéndose en ventaja sin hacer méritos. En el primer minuto, Carlos Luna apareció en las puertas del área y definió bajo y a la derecha de Lucas Ischuk. Un Ischuk que sólo volvió a trabajar en un mano a mano ante Luna.Enseguida, el equipo hoy conducido por la dupla Salvador Mónaco-Ricardo Salomón reaccionó aprovechando todos sus puntos altos y la pasididad del adversario y volvió a encontrar el camino. A los nueve, un desborde por derecha de Rodríguez terminó con Jonathan Blanco, apareado con Emanuel Gigliotti, metiéndola en contra. Y a los 12, Pereyra pasó entre toda la floja defensa visitante y empaló la pelota con gran categoría ante la salida de Islas. A partir de entonces, el trámite pareció cerrado. El local se abocó a cortar los circuitos del rival, mantener el balón y agazaparse para liquidarlo. Casi arriesga los tres puntos con un tiro libre de Maximiliano Oliva que pasó cerca, pero luego Longo pegó un tiro en el travesaño y Pereyra desperdició un remate alto. Tigre ya no tenía alma y se acercaba su sentencia final.Y lo esperado llegó a los 35. El ingresado David Drocco jugó por izquierda, habilitó en la medialuna a Gigliotti y éste cerró la persiana del encuentro con un potente disparo sobre Islas.El desenlace fue el comienzo de una fiesta para el local, que se desahogaba ante su público, mientras que Tigre continúa sin rumbo y, lo que es peor, sin respuestas futbolísticas.
Fuente: www.tycsports.com
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