domingo, 2 de octubre de 2011

Boca venció a Tigre y amplió su ventaja

El Xeneize se impuso por 1-0 en la Bombonera, le sacó cinco puntos de diferencia al escolta Atlético de Rafaela y ostenta un invicto de 20 partidos. El único gol lo anotó Diego Castaño (PT 13m) en contra, tras un remate de Rivero. El equipo de Falcioni se puso arriba rápidamente, se defendió con solidez y pudo haber goleado de contragolpe gracias a un genial Riquelme.

Boca derrotó por 1-0 a Tigre en la Bombonera con una actuación basada en la solidez defensiva y estiró su ventaja en la cima del Apertura, ya que el escolta Atlético de Rafaela quedó cinco puntos por debajo. El elenco de Falcioni, con otra demostración de autoridad, amplió su invicto a 20 partidos (10 del Clausura y otros tantos en el presente certamen) y dio otro paso rumbo al título. En cambio, el Matador no logró sostener el rendimiento regular que arrastraba y sigue en zona de descenso directo.

No se le presentó accesible el partido al Xeneize por culpa del planteo ordenado y ambicioso de su rival, que buscó presionar en campo rival y abrir la cancha con los carrileros Díaz y Leone. Riquelme estuvo bien cercado por Castaño y los piques explosivos de Clemente brillaron por su ausencia en esos primeros 10 intensos minutos.

Sin embargo, Boca halló la ventaja inesperada a los 13 a partir de una jugada llena de picardía de Riquelme. En un tiro libre, Román amagó con tirar el centro pero abrió a la derecha para Rivero, que se le escapó a Luna y sacó un remate cruzado que Castaño empujó contra su propia red. Eficacia digna de un serio candidato al título...

A partir de allí, el local fue inteligente para compactar sus líneas y no darespacios. Rivero y Erviti respaldaron en el medio a Erbes y la línea de cuatro defensiva no falló. Tigre intentó explorar las bandas, pero se topó ante una estructura muy sólida. Román Martínez y Morales tampoco pudieron ser los nexos para activar a los puntas Luna y Maggiolo.

Boca supo navegar en aguas calmas durante el resto del primer tiempo y, en los últimos 10 minutos, se animó a apretar el acelerador para buscar el segundo. Clemente y Mouche, en dos ocasiones, desbordaron por la izquierda a espaldas de Díaz e inquietaron con centros filosos. El entretiempo llegó justo a tiempo para salvar a un Tigre impotente.

En el amanecer del complemento, Tigre quemó naves en búsqueda del empate y volvió a adelantarse para poner a prueba al líder. Y el anfitrión respondió con una defensa que no se desordenó casi nunca. En la única excepción a la regla, Orion contuvo un tiro de Echeverría con autoridad.

A partir de los 10 minutos, Boca logró salir de ese leve asedio del visitante y coqueteó con el segundo. Primero, Riquelme exigió a su amigo García con un remate desde fuera del área y Mouche no aprovechó el rebote. Precisamente, el Xeneize derrochó otro par de chances por las malas definiciones del delantero, siempre bien asistido por un genial Riquelme.

Con la mitad del Apertura consumida, el equipo de Falcioni gobierna con comodidad y se ilusiona con festejar luego de tres años. Su receta es tan simple como efectiva: solidez defensiva con compromiso de todos los jugadores, paciencia para encontrar las ventajas, oportunismo para golpear en los momentos vitales, experiencia para administrar los partidos y una notable mejoría de sus individualidades. El próximo examen del puntero también será como local y enfrente estará Belgrano.

Fuente: www.tycsports.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario