Aplastó a Tigre en Mendoza por 6-2 con tres goles de Salinas, la gran figura. El equipo de Asad mostró un gran nivel y además se repuso rápido cuando su rival se le puso a tiro de empate por un error del árbitro. Con esta victoria, desplaza por un punto a Independiente de la cima del Clausura.
La punta estaba servida para Godoy Cruz, y su entrenador, el Turco Omar Asad, no quería perderse el banquete. Es que la derrota de Independiente, el sábado, ante San Lorenzo, había dejado el camino despejado hacia la cima para el Tomba. Claro que para eso debía derrotar a Tigre, en Mendoza.
No quiso sorpresas el Turco y fiel a su estilo, el que puso a Godoy Cruz en lo más alto de la tabla del Clausura, salió a jugar ante Tigre con tres delanteros: Federico Higuaín, César Carranza y Rodrigo Salinas. Con la premisa de salir a atacar desde el primer minuto, el local se apoderó de la pelota y Nicolás Olmedo se hizo dueño del medio en los primeros minutos. No le dio tiempo a Tigre.
Después de varios avances que no llevaron peligro, pero que tenían buenas intenciones sobre el arco de Islas, se produjo la apertura del marcador. A los 12, Carranza desbordó por izquierda y fue preciso con el centro. Por el segundo palo apareció Dutari y puso la frente para el 1-0, aprovechando que Sigali se había llevado la solitaria marca de Arruabarrena. El primer objetivo de Godoy Cruz estaba cumplido: convertir antes de los 15 para jugar con tranquilidad el resto del partido, la punta ya estaba en el bolsillo, ahora había que mantenerla. Pero claro que con la tranquilidad llegó también la relajación. Ahí fue donde creció Tigre, con Castagno manejando la pelota en la mitad de la cancha y Carlos Luna aguantando arriba ante los centrales.
Pero a pesar de dominar terreno y balón, Tigre fue incapaz de inquietar al arquero local Nelson Ibáñez. Apenas un remate muy débil de Brian Rodríguez y un centro de Arruabarrena desde la izquierda que Luna no llegó a conectar. Nada más. Pittana marcó el cierre de la primera etapa y Asad se retiró al vestuario puntero con su Godoy Cruz.
En el cierre del primer tiempo Asad tuvo un gesto que justificó lo que sucedió en el inicio del complemento: Higuaín recibió un golpe y pidió el cambio y el técnico puso a Vega para mantener a los tres delanteros, en vez de usar a un volante para defender la ventaja. El mensaje de atacar se repitió en el vestuario y a los 27 segundos del complemento la ventaja ya era más abultada. Olmedo tocó para Salinas que se metió al área por la izquierda y definió de zurda cruzado para poner el 2-0. Pero el delirio de la gente de Godoy Cruz llegó a los 6. Salinas tocó para Carranza que se metió al área a toda velocidad y tocó atrás. Vega la empujó de zurda y clavó el 3-0. Brillante. Pero al partido todavía le quedaban sorpresas. Porque el local se durmió en sus laureles y Tigre, herido, fue por el descuento. Corrían 9 minutos cuando llegó el lateral al área de Ibáñez, Luna peinó la pelota entre tres defensores y por detrás quedó sólo Lazzaro que definió de derecha para instalar el 1-3 y empezar a soñar con la remontada.
Después, la polémica. Leone mandó un centro al área desde la izquierda, Lazzaro conectó de palomita, tapó Ibáñez pero dejó vivo el rebote. Ahora Luna metió el frentazo, otra vez tapó el arquero aunque la pelota pegó en la espalda de Zelmar García y se dirigió mansita al arco. Ibáñez se recuperó y frenó el balón en la línea contra el palo izquierdo. Pittana dejaba seguir el juego hasta que se percató que el línea Norberto Moyano le señalaba el centro de la cancha. Gol. Todo el cuerpo técnico y los jugadores de Godoy Cruz se fueron encima del asistente. Nada, gol y 3-2.
¿Tenía ventaja de tres goles Godoy Cruz? Tigre se recuperó, pero el local fue otra vez a buscar la diferencia que había perdido. No hubo lugar para el análisis. Iban 21 y Carranza ejecutó un tiro libre perfecto desde la derecha, de zurda, por afuera de la barrera. El remate dio en el travesaño y dejó a todos descolocados, menos a Carlos Sánchez que devolvió la bola al área de zurda. Ahí apareció Sigali para tocar de derecha y poner el 4-2. Explotó el Malvinas Argentinas, y el banco local descargó su bronca sobre Moyano. Pero el Tomba quería tres de ventaja. Entonces apareció la gran figura de Olmedo. Encaró, bicicleta para salir sobre su derecha y remate cruzado. Islas alcanzó a tapar, pero le dejó el gol servido a Salinas que selló el trámite y puso el 5-2. Otra vez había fiesta en Mendoza.
Pero había más. Para que la fiesta fuera completa, Salinas marcó el 6-2 con una volea tras un buen desborde de Chávez por izquierda. El delantero que debutó con un gol ante Vélez, hace dos fechas, fue titular por primera vez esta tarde y devolvió con un hat-trick la confianza de Asad. Esa confianza que el técnico generó en sus jugadores y que tiene al Tomba como el líder del Clausura.
Fuente: www.clarin.com