lunes, 11 de octubre de 2010

Piedras, disparos y un intruso en la cancha

La enemistad entre los hinchas de Tigre y de Boca no es nueva, y los recaudos que tomó la policía para organizar el traslado de La 12 fueron insuficientes. La caravana de micros fue sorprendida por un puñado de violentos que vestían los colores de Tigre, quienes apedrearon los colectivos que transportaban a los visitantes. Las fuerzas de seguridad apuraron el paso de los vehículos y con disparos de balas de goma dispersaron a los atacantes. Claro que los problemas volvieron tras el partido, porque el micro que trasladó al plantel visitante fue apedreado y, Riquelme -que acompañó al plantel-, muy silbado. En la cancha, en el ST, un particular de Tigre invadió la cancha. El árbitro Baldassi detuvo el cotejo, Galmarini lo acompañó y un integrante de la seguridad lo retiró. En el final, el DT Caruso Lombardi sostuvo un duro cruce con un simpatizante de Tigre.

"Frases"

TIGRE 1 BOCA 2
"Perder así es nuestra culpa. Fue un córner aislado, una distracción, aunque no es la primera vez que nos pasa y los errores nosotros los pagamos caro. Si había un equipo que merecía perder, ése era Boca".
"Uno se queda con esa bronca, ¿Quién me la va a sacar?. Si el equipo no responde en los últimos minutos vamos a pelear el descenso todo el año".
"Lamentablemente dejamos ir muchos puntos sobre la hora. Boca, como contra Lanús mereció ganar, hoy debió perder. Ni ellos esperaban ganar".
"Tenemos que entender que los partidos duran 90´y no 85´. Si te tiran un pelotazo de 60 metros y termina en gol, la culpa es nuestra". (RICARDO CARUSO LOMBARDI)

domingo, 10 de octubre de 2010

Triunfo de la Reserva

Tigre venció a Boca en el partido de reserva por 3 a 0, los goles fueron convertidos por Lucas Simón en dos ocasiones y Diego Ftacla, el restante.
TIGRE 3
De Angelis
Angulo Villegas, Laso, De Miranda, Celaya
M. Blanco, J. Blanco, Sánchez, Lanaro
Simón, Ftacla
DT: Horacio Montemurro
Cambios: Bordacahar x Lanaro; Gómez x Simón
BOCA 0
D´Angelo
Sauro, Pérez, Ruíz
Calvo, Mazzola, Colazo, Baima
Sánchez Miño
Araujo, Acosta
DT: Roberto Pompei
Arbitro: Juan Pafundi

Lo podés gritar, Bichi

¡Por fin un poco de paz, Borghi! Boca volvió al triunfo, en una cancha difícil: en el final, puso el 2-1 con un derechazo de Chávez. El DT lo vio en un rincón de Victoria, con el presidente, y festejó este 2-1. Ojo que se lesionó Battaglia. Y el domingo que viene puede volver Riquelme.
Y un día se termina la mufa, Bichi. Después de una semana tan hablada, tan conversada, con tantas idas y vueltas, un poco de paz para Borghi. El técnico que vio el partido en un rincón de Victoria (suspendido por haber salido 40 segundos tarde el fin de semana anterior) seguro que no quedó conforme con este 2-1 en cuanto a rendimiento, tan seguro como que igual se debe haber ido contento. Sabe el entrenador que así Boca no va a llegar a ningún lado, que para soñar con cosas grandes hay que armar un equipo, también sabe que estos triunfos al menos dan tranquilidad para trabajar con más serenidad, sin tanta histeria alrededor. Mientras el domingo anterior Borghi ponía en duda su continuidad, en esta semana no habrá dudas: ganó Boca, después de dos partidos, y entonces cambia la mano. Le costó, claro. Pero ganó y por primera vez en su ciclo la suerte estuvo a favor del Bichi. Porque durante los 90, 90 y pico de minutos, Boca no fue más que el equipo de Caruso. Un Tigre bien plantado, que no se cayó después del zurdazo de Matías Giménez y apretó. Y llegó al empate rápido con un error defensivo, porque es increíble que el 9 lungo (Stracqualursi) haya cabeceado solo en el área rival. ¡Qué dolor de cabeza para el técnico! En el duelo táctico, ganaba Caruso, un especialista en amargar a Boca con otros equipos. Este Boca que, como bien dijo Riquelme (vio el partido cerquita del banco) en la semana, no se sabe muy bien a qué juega. Y eso no pasa por dibujos tácticos, sino más bien por idea de juego. El que tenía la manija era Tigre en el partido, después de levantarse del 0-1. Y el segundo tiempo siguió así, con un Boca híbrido, sin juego asociado, al menos peleando el partido con lo que tenía. Y un Tigre más querendón, aunque tampoco hiperofensivo. Boca hacía lo que podía en un partido incómodo, con un rival que lo apretaba y lo buscaba. Encima se lesionó Battaglia, por un patadón por el que tuvo que dejar la cancha. ¿Qué habrá pensado Borghi en ese momento? Pero el destino le tenía preparado un regalito al Bichi en el final: después de un rechazo en un córner, la agarró el Pochi Chávez y le dio de derecha, a la derecha de Ardente. Y a cobrar, a festejar con un embarazo virtual. Y sí, Bichi, qué lo parió, lo que costó esta victoria.
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