El Matador se impuso por 2-0 en Sarandí con goles de Néstor Ayala (PT 9m) y Carlos Luna, de penal (ST 12m) y ya lleva tres encuentros sin tropiezos. Al local le duró poco la alegría tras vencer a Racing.
Sin hacer un gran despliegue ni pasar sufrimiento, Tigre construyó este viernes una sólida victoria por 2-0 frente a Arsenal en Sarandí. El Matador, que no pierde ya desde hace tres presentaciones, se apoyó en su contundencia, practicidad e inteligencia para encaminar un triunfo tranquilo y útil para seguir de cerca al pelotón de arriba.
El primer tiempo fue una muestra de la importancia de sacar ventaja en los momentos favorables. El conjunto de Ricardo Caruso Lombardi logró golpear en la primera jugada de riesgo que generó, a los nueve minutos tras un desborde por derecha de Damián Leyes que Néstor Ayala tocó alto y a la red, y luego se replegó peligrosamente para cuidar la ventaja.
Sin embargo, los de Jorge Burruchaga pecaron de tibios, con los intentos de Cristian Alvarez y las bajadas de Franco Jara para buscar el balón. Justamente un centro de Alvarez que no pudo aprovechar el delantero fue la más clara para el local, que no fue tan eficaz como su rival.
Pero en el entretiempo la visita pareció convencerse que seguir aguantando sería un suicidio futbolístico y salió más decidida a liquidar el pleito. Rodolfo Arruabarrena apareció por izquierda pero desperdició su oportunidad, hasta que a los 12 Darío Espínola cometió una mano en el área y Carlos Luna, con un tiro al medio del arco, consiguió el segundo.
Otra vez haciendo gala de su contundencia, el Matador ya no se retrasó tanto, sino que esperó que corrieran los minutos. Leandro Lázzaro lo tuvo en las narices de Cristian Campestrini pero lo trabaron justo, y antes el ingresado Facundo Silva había disparado afuera tras una buena jugada.En los instantes finales Tigre volvió a refugiarse en el fondo y Mauro Obolo le quemó las manos a Daniel Islas con un cabezazo, pero con menos tiempo por correr y mayor ventaja que antes. Entonces sí fue negocio y terminó festejando un triunfo que consolida su mejoría en tres fechas tras el traspié del debut y que, por qué no decirlo, lo tiene en la punta con un partido más. A Arsenal, que venía de sacarse la mufa ante Racing, le duraba poco la alegría.
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