“Los hicimos retroceder a las piñas”

Damián Albil confirmó que uno de los empleados de San Pablo sacó un arma y aseguró que el plantel se salvó porque se pararon en la puerta del vestuario y obligaron a golpes a los de seguridad a ir para atrás. “De milagro no hubo heridos graves”, agregó.

Situación límite si las hay vivió Damián Albil. El arquero confesó que, durante los incidentes en el vestuario, fue apuntado con una pistola por uno de los 15 hombres de seguridad del San Pablo que entraron a golpear a los jugadores de Tigre. “Volaban botellas. Todo el plantel se paró en la puerta del vestuario y los hicimos retroceder a las piñas. Era gente entrenada”, explicó el arquero apenas llegó a Aeroparque.

Además, el de Tigre aseguró que “de milagro no hubo heridos graves”, y sostuvo que “esto estaba armado porque no fue algo aislado”. Y contó qué pasó cuando hablaron con un miembro de la Conmebol: “Nos pidió que salgamos a jugar, que no había pasado nada grave. Si se seguía iba a ser una batalla campal dentro de la cancha. No estaban dadas las condiciones y fue la mejor decisión para que no pasara algo más”.

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"Si te apuntan con un arma es muy difícil seguir..."

En la llegada de Tigre al país, Javier García se mostró muy dolido por todo lo ocurrido: "La final era una ilusión única pero terminó siendo una desilusión", dijo con tristeza.

La angustia y la bronca fueron los sentimientos que se vislumbraron este jueves en Aeroparque. En la llegada del Matador a Buenos Aires, Javier García, al igual que sus compañeros, sigue sin poder entender lo que pasó en el vestuario del Morumbí: "Fue algo impensado. Nos encontramos con 10, 15 tipos grandotes de ellos cuando entramos al vestuario. Sin hablar, se pusieron en guardia y nos empezaron a pegar. Nosotros nos defendimos como pudimos, fue una locura", declaró el ex arquero de Boca.

Además hizo hincapié en el temor de salir a la cancha luego del aberrante accionar de la policía y de la seguridad de San Pablo: "Si te apuntan con un arma es muy difícil seguir... No teníamos seguridad para salir a jugar. Podía pasar algo peor", remarcó. Y a pesar de lo ocurrido, piensa en que no les van a creer: "¿San Pablo? Ellos van a pensar que nosotros estamos mintiendo. Hay videos, no estamos mintiendo nada. La final era una ilusión única pero terminó siendo una desilusión", cerró dolido.

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"Tigre fue lamentable"

Increíble pero real, los del San Pablo cuestionan al equipo de Gorosito. Rogerio Ceni dijo que inventaron todo y que "va contra la dignidad". De paso, el arquero brasileño hizo una crítica general a los argentinos. Pará...

Disfrutan y encima la gozan. Mientras los jugadores de Tigre siguen hablando de lo mal que lo pasaron por las agresiones, los del San Pablo se ríen y se amparan increíblemente en que hubo exageración. Una locura. Y más raro viniendo de un tipo de experiencia como Rogerio Ceni, quien ganó su título número 16 con el equipo. El mismo que atacó a Tigre y a los argentinos en general: "Ya pasó el tiempo en que jugabas contra los argentinos y, como no había cámaras, ellos decidían; y el árbitro tenía la culpa porque no sancionaba. Es necesario que existan árbitros para cumplir las reglas".

Increíble lo de Rogerio, quien tiró que "nunca en mi vida vi algo parecido". Y claro, no es normal que suceda esto. "Técnicamente ellos eran muy inferiores, por eso crearon la confusión para no volver al partido. Eso va contra la dignidad, contra lo que representa el deporte. Crear un tumulto de ese tipo para no volver es lamentable. Ganar o perder es parte del juego, pero la dignidad está por encima de todo". Y siguió, convencido de que Tigre exageró: "Si el partido estaba 0-0, ellos no hubiesen hablado de ningún tumulto. Como tenían que revertir el 0-2, hicieron eso; y si continuaban, llegarían al tercer gol y al cuarto fácilmente. Realmente fue algo lamentable". Lamentable fue lo que hicieron los de (in)seguridad del San Pablo. Y lo que dijo Rogerio.

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“Es un maricón..."

Así llegó Tigre tras la agresión en San Pablo.

Gorosito se mostró indignado por el papelón del San Pablo y atacó sin piedad a Ney Franco, entrenador del equipo brasileño: "Escuchar las barbaridades que dijo el presidente y, sobre todo, las pavadas del DT, te da veneno e impotencia".

“La fuga de los argentinos es nuestra mayor victoria”. El presidente de San Pablo, Juvenal Juvencio, no se anduvo con vueltas a la hora de justificar los festejos de su club tras el bochorno en la final con Tigre. El entrenador Ney Franco también se prendió en la chicana: “Estoy saboreando el título frente a un adversario cobarde”. Los brasileños disfrutan y encima gozan al Matador.

Está claro que no tomaron dimensión de las denuncias que realizaron los argentinos y por eso Néstor Gorosito repudió sus comentarios. “Escuchar las barbaridades que dijo el presidente y, sobre todo, las pavadas del entrenador te da veneno e impotencia, porque mancha tanta lucha y mérito de los jugadores y dirigencia”, expresó en el programa 90 Minutos. Y agregó más tarde en La Red: “El entrenador es un maricón. Cuando vienen son reyes de la cortesía, pero allá estuvo comentando que solo queríamos pelear, que éramos unos cobardes. Una locura”.

Además, sobre los incidentes ocurridos en Brasil, el entrenador contó que “lo que hizo San Pablo es una barbaridad, si empatábamos nos asesinaban. Estoy indignado con lo que vivimos”. Y a pesar de ser consciente de que “no va a pasar nada”, pidió tomar medidas ejemplares: “Hoy nos tocó a nosotros y mañana le puede tocar a cualquiera. Espero que los otros equipos nos apoyen en esto. Me crucé con unos pibes que viajaron y me contaron que la policía los esposó y los obligaban a decir: ¡Viva Brasil!”

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