Metió el zarpazo

Tigre le ganó bien a un Newell's deslucido y sigue subiendo en la tabla de los promedios. Lo pasó a River y lo alcanzó a Independiente. El gol lo metió Stracqualursi.

Tigre se aprovechó de las ventajas que le dio Newell’s. El equipo de Sensini fue una sombra de lo que supo ser y volvió a caer de visitante. No fue sólido en defensa, el medio sufrió más de la cuenta y arriba le costó muchísimo llegar. Mientras que el Matador salió convencido de la final que se jugaba y por eso pegó de entrada. Ahora respira un poco más tranquilo. Superó a River y alcanzó a Independiente. La Lepra tendrá mucho por corregir si es que quiere recuperar el protagonismo que supo conseguir en otros campeonatos.

Newell’s salió con un esquema novedoso para la idea del técnico. Los cuatro volantes del medio jugaron pensando en darle una mano a una defensa que sufrió horrores en las primeras dos fechas. Sin embargo no pudieron y por momentos agudizaron los problemas. Mateo y Bernardi so volvieron locos corriendo, mientras que los laterales de Tigre se hicieron un picnic en cada pelota cruzada. La izquierda de Newell’s, en el primer tiempo, fue una fiesta para el Matador. Y en una de esas pelotas aéreas llegó el gol del grandotes Stracqualursi. Doble error de una última línea lenta y dubitativa. Vella no cerró, y los tres que sobraban fueron sobre el mismo jugador dejando al grandote solito. El primer tiempo fue de Tigre de principio a fin y en la segunda etapa Sensini intentó enderezar el rumbo. Metió a Tonso y Cobelli y Newell’s fue otro. Tuvo una idea de juego y presionó, pero siguió sufriendo cada vez que lo atacaron.

Tigre, un rival que ganó bien pero que no le sobró nada, desperdició cuanta contra le quedó a sus delanteros y por eso le dio vida hasta el final a Newell’s. La imagen de Peratta rechazando del medio y casi clavándola en el ángulo, fue la pintura perfecta para un equipo desconcertado. Buen triunfo del Matador y mucha tarea para el hogar para Sensini.

Fuente: www.ole.clarin.com