lunes, 12 de abril de 2010

Un cruce durísimo entre los dos técnicos

A la vista de todos y enfocados por las cámaras de televisión, Asad y Caruso se dijeron de todo.
No está tan claro cuál fue la chispa que detonó el incidente, pero sí quedó reflejado para la vista de todos el duro choque verbal entre los técnicos de Godoy Cruz y Tigre. Los insultos fueron subiendo de tono a medida que continuaba la discusión, y parecieron sacados de un partido de barrio más que de un enfrentamiento entre dos equipos profesionales.
Las cámaras enfocaron el enfrentamiento y se vio claramente cuando Ricardo Caruso Lombardi le gritaba "¡Falopero!" a Omar Asad, y acercaba la mano a su nariz en un gesto que pretendía imitar la inhalación de drogas. El DT de los mendocinos no se quedó atrás y replicó: "¡Vos les pedís plata a los jugadores! ¡Corrupto! ¡Transa!".
Dio la impresión de que el choque, que siguió con variados insultos, hubiera terminado a las trompadas si a ambos no los contenían sus colaboradores. De no ser así, acaso hubiera habido más para lamentar todavía.
Fuente: www.clarin.com

Godoy Cruz llegó a la punta jugando como un verdadero campeón

Aplastó a Tigre en Mendoza por 6-2 con tres goles de Salinas, la gran figura. El equipo de Asad mostró un gran nivel y además se repuso rápido cuando su rival se le puso a tiro de empate por un error del árbitro. Con esta victoria, desplaza por un punto a Independiente de la cima del Clausura.
La punta estaba servida para Godoy Cruz, y su entrenador, el Turco Omar Asad, no quería perderse el banquete. Es que la derrota de Independiente, el sábado, ante San Lorenzo, había dejado el camino despejado hacia la cima para el Tomba. Claro que para eso debía derrotar a Tigre, en Mendoza.
No quiso sorpresas el Turco y fiel a su estilo, el que puso a Godoy Cruz en lo más alto de la tabla del Clausura, salió a jugar ante Tigre con tres delanteros: Federico Higuaín, César Carranza y Rodrigo Salinas. Con la premisa de salir a atacar desde el primer minuto, el local se apoderó de la pelota y Nicolás Olmedo se hizo dueño del medio en los primeros minutos. No le dio tiempo a Tigre.
Después de varios avances que no llevaron peligro, pero que tenían buenas intenciones sobre el arco de Islas, se produjo la apertura del marcador. A los 12, Carranza desbordó por izquierda y fue preciso con el centro. Por el segundo palo apareció Dutari y puso la frente para el 1-0, aprovechando que Sigali se había llevado la solitaria marca de Arruabarrena. El primer objetivo de Godoy Cruz estaba cumplido: convertir antes de los 15 para jugar con tranquilidad el resto del partido, la punta ya estaba en el bolsillo, ahora había que mantenerla. Pero claro que con la tranquilidad llegó también la relajación. Ahí fue donde creció Tigre, con Castagno manejando la pelota en la mitad de la cancha y Carlos Luna aguantando arriba ante los centrales.
Pero a pesar de dominar terreno y balón, Tigre fue incapaz de inquietar al arquero local Nelson Ibáñez. Apenas un remate muy débil de Brian Rodríguez y un centro de Arruabarrena desde la izquierda que Luna no llegó a conectar. Nada más. Pittana marcó el cierre de la primera etapa y Asad se retiró al vestuario puntero con su Godoy Cruz.
En el cierre del primer tiempo Asad tuvo un gesto que justificó lo que sucedió en el inicio del complemento: Higuaín recibió un golpe y pidió el cambio y el técnico puso a Vega para mantener a los tres delanteros, en vez de usar a un volante para defender la ventaja. El mensaje de atacar se repitió en el vestuario y a los 27 segundos del complemento la ventaja ya era más abultada. Olmedo tocó para Salinas que se metió al área por la izquierda y definió de zurda cruzado para poner el 2-0. Pero el delirio de la gente de Godoy Cruz llegó a los 6. Salinas tocó para Carranza que se metió al área a toda velocidad y tocó atrás. Vega la empujó de zurda y clavó el 3-0. Brillante. Pero al partido todavía le quedaban sorpresas. Porque el local se durmió en sus laureles y Tigre, herido, fue por el descuento. Corrían 9 minutos cuando llegó el lateral al área de Ibáñez, Luna peinó la pelota entre tres defensores y por detrás quedó sólo Lazzaro que definió de derecha para instalar el 1-3 y empezar a soñar con la remontada.
Después, la polémica. Leone mandó un centro al área desde la izquierda, Lazzaro conectó de palomita, tapó Ibáñez pero dejó vivo el rebote. Ahora Luna metió el frentazo, otra vez tapó el arquero aunque la pelota pegó en la espalda de Zelmar García y se dirigió mansita al arco. Ibáñez se recuperó y frenó el balón en la línea contra el palo izquierdo. Pittana dejaba seguir el juego hasta que se percató que el línea Norberto Moyano le señalaba el centro de la cancha. Gol. Todo el cuerpo técnico y los jugadores de Godoy Cruz se fueron encima del asistente. Nada, gol y 3-2.
¿Tenía ventaja de tres goles Godoy Cruz? Tigre se recuperó, pero el local fue otra vez a buscar la diferencia que había perdido. No hubo lugar para el análisis. Iban 21 y Carranza ejecutó un tiro libre perfecto desde la derecha, de zurda, por afuera de la barrera. El remate dio en el travesaño y dejó a todos descolocados, menos a Carlos Sánchez que devolvió la bola al área de zurda. Ahí apareció Sigali para tocar de derecha y poner el 4-2. Explotó el Malvinas Argentinas, y el banco local descargó su bronca sobre Moyano. Pero el Tomba quería tres de ventaja. Entonces apareció la gran figura de Olmedo. Encaró, bicicleta para salir sobre su derecha y remate cruzado. Islas alcanzó a tapar, pero le dejó el gol servido a Salinas que selló el trámite y puso el 5-2. Otra vez había fiesta en Mendoza.
Pero había más. Para que la fiesta fuera completa, Salinas marcó el 6-2 con una volea tras un buen desborde de Chávez por izquierda. El delantero que debutó con un gol ante Vélez, hace dos fechas, fue titular por primera vez esta tarde y devolvió con un hat-trick la confianza de Asad. Esa confianza que el técnico generó en sus jugadores y que tiene al Tomba como el líder del Clausura.
Fuente: www.clarin.com

Se pasaron de la raya

Caruso y Asad se dijeron de todo después del sexto gol del Tomba. Entre varios insultos, los dos técnicos se amenazaron con esperarse afuera. El técnico de Tigre hizo gestos referidos al consumo de drogas y el de Godoy Cruz al soborno.
¿Cosas que tiene el fútbol? ¿Folclore argentino de este deporte? La puteada, la increpada. ¿Quién tiene más huevos? ¿Quién es el más macho? Entre tanto gol dando vueltas, era sabido que por Mendoza iba a aparecer un toque de calentura. Esta vez, no fue ni con sutileza ni con picardía. Esta vez, al Turco Asad y a Caruso Lombardi se les fue la mano.
Había lateral para Godoy Cruz y Caruso tomó la pelota y la pateó en dirección a Asad, al parecer ese fue el comienzo de la riña. (¿habrá sido por esto realmente?). La historia fue demasiado grave, el técnico de Tigre hizo gestos referidos al consumo de drogas y de enfrente Asad le respondió con una manito encima imitando un soborno. Cosas que quedan dentro del campo de juego. Por lo menos, si las amenazas entre ambos no se consuman...

Los mira desde arriba

Godoy Cruz le metió seis goles a Tigre y aprovechó la chance de subirse a lo más alto del torneo. Gran partido de Carranza y Salinas (tres goles). El Tomba sigue sin perder en Mendoza y va por todo. La perla negra: el cruce gestual de los técnicos Asad y Caruso Lombardi.
Después de la sequía de goles dominguera, Godoy Cruz y Tigre saldaron la abstinencia en la red y se destaparon con un partidazo de ida y vuelta y sobre todo, de goles. De entrada nomás, el equipo del Turco Asad salió dispuesto a demostrar que no iba a dejar pasar la nueva oportunidad que le dio Independiente con su derrota ante San Lorenzo y que la punta era ahora o nunca.
Y lo consiguieron gracias a la inspiración de Carranza, que en todo momento se hizo cargo del partido y fue el que le dio claridad al Tomba para llegar con peligro al arco de Daniel Islas. Ya a los 12 minutos fue Carranza quien le puso un centro preciso a Dutari, que definió sin problemas ante la salida de un arquero que nada tenía que hacer.
Godoy Cruz demostró durante todo el campeonato que sabe a lo que juega y que cuando te contraataca en velocidad casi siempre la pelota termina en la red. Con Federico Higuaín volcado por la izquierda, fueron armando de a poco una goleada que lo pone en lo más alto de la tabla, en soledad por la derrota del Rojo y cada vez más fuerte de local, donde otra vez demostró que son más una realidad que una sorpresa.
Hubo un momento de confusión que casi le complica la tarde a Asad y sus muchachos. Primero porque se durmieron en la salida de un lateral y Lazzaro (que resucitó en la red) la empalmó de media vuelta y dejó sin chance a Ibañez. Unos minutos después, la cosa se puso más complicada porque a instancias del asistente Moyano, Pittana convalidó un gol a pesar de que la pelota no había ingresado en el arco. Hubo confusión, discusiones y corridas, pero el árbitro se confió en lo que le decía el asistente y el partido se puso 3 a 2. Pero sólo fue un susto.
Fueron diez minutos de incertidumbre nada más. Porque Godoy Cruz no perdió la calma y siguió apostando a su fútbol sin dejarse llevar por sus nervios. Y los goles llegaron casi por decantación: primero se destapó Sigali y luego Salinas completó la cuenta en dos oportunidades. Fue un 6 a 2 contundente, en un partido que se convirtieron la misma cantidad de goles que se habían convertido en los restantes de la fecha porque el domingo no hubo festejos y fueron todos empates 0 a 0.
Godoy Cruz sueña. Aunque nadie pagaba dos pesos por este presente, está puntero y solo. Y a diferencia de Independiente, parece estar en una escala ascendente. Tiene solidez defensiva, juego colectivo, goles y por sobre todas las cosas, un grupo que de afuera parece bien compacto, comprometido con los objetivos y los pedidos del técnico.
Fuente: RODRIGO CALEGARI rcalegari@ole.com.ar