jueves, 13 de diciembre de 2012

Campeón del bochorno


Tigre perdía 2-0 pero no pudo terminar la final de la Sudamericana, que increíblemente le dieron por ganada a San Pablo. En el entretiempo agredieron al equipo: "Nos cagaron a palos", denunció Galmarini. "Hasta sacaron revólveres", agregó Gorosito. Vergonzoso.

Bochorno. Vergüenza. Increíble. Diez y media de la noche y San Pablo que festeja de título de la Sudamericana. Explota el Morumbí con el pitazo final del árbitro Osses. Un pitazo inédito, después de 45 minutos de juego. Porque Tigre no salió a jugar el segundo tiempo después de haber sufrido una importante agresión de parte de la gente de seguridad paulista. De terror lo que pasó, un final que no merecía el equipo de Victoria, luchador durante toda la Copa. Perdía 2-0 y estaba cerca del KO, pero el golpe que lo noqueó fue afuera de la cancha. Después de algunos agarrones al terminar el PT, entraron al túnel y ahí empezó la barbarie. "Nos pegaron, se metieron adentro del vestuario. Es una vergüenza, nos mataron a palos", contó ya dentro del vestuario Lucas Orban.

"Me tuvieron que coser, esto es desde el arranque. No nos dieron lugar para entrenar, no nos dejaban. Nos estaban esperando para cagarnos a palos. Una locura. Quería terminar ser campeón ob subcampeón", explicó Galmarini, dolido. "Treinta tipos, estaba todo armado, una tontería,un mamarracho sin sentido", agregó, golpeadísimo. "Sacaron fierros, cagones, sacaron revólveres para amenazar. Hubo zona liberada, nos cagaron a palos", siguió el relato el experimentado jugador. Pasó en en el regreso al vestuario. Según todo Tigre, los agredieron con violencia y estaba todo armado. "Estaban los patovicas y uno de ellos sacó el revólver. Y empezaron a pegar y lastimar. entró la policía y los agarró a palos. Una locura", se quejó Gorosito.

De terror la historia de Tigre en San Pablo. El día previo no pudo practicar en el Morumbí y, después deestar 0-2 en el primer tiempo, le dieron con todo en el vestuario. Inédito, jugadores rivales y terna arbitral estuvieron esperando en la cancha a ver si el equipo de Victoria salía a jugar el segundo tiempo. Pero lógicamente no lo hizo. Y lo increíble es que la Conmebol decidió, a través del árbitro Osses, dar por terminado el partido. Y San Pablo festejó como no debía haber festejado, mientras Tigre seguía sufriendo todo el horror que había vivido.
Fuente: www.ole.com.ar

"Sin un muerto de casualidad"


Jorge Borelli, ayudante de Gorosito, contó que "nunca me pasó algo así. Una locura". Y mostró un corte en la mejilla derecha. También dejaron su testimonio los jugadores de Tigre.

Jorge Borelli es el ayudante de campo de Gorosito. Ex jugador, así contó lo que sucedió en el camino al vestuario tras el primer tiempo: "Esto no lo vi nunca. Cuando el tipo, no se escapó un tiro no se cómo. Pegaban y pegaban con los palos".
Sorprendido, explicó que "nos apuntó a todo. Fue una locura. Fui a jugar a lugares bravos pero como esto, nuna lo vi. sinceramente fue una locura. No hubo un muerto de casualidad".
Otros testimonios:
Lucas Orban: "No nos dejaron entrar al vestuario, nos empujaron los seguridad.  Nos pegaron con palos, con bancos, sacaron un revólver... Después vino la policia y también nos pegó". 
Galmarini:  "Un mamarracho, nos pegaron, estaba todo armado. Te sacan un fierro, cagones, nos amenazaron con revólveres.  No nos dejaron hacer la entrada en calor, nos trataron mal desde que llegamos a Brasil". 
Albil: "Sacó el arma y empezó a los culatazos. Es inentendible de un equipo como San Pablo. Cuando llegué estaban los chicos peleando, eran como 20, todos con chombas del San Pablo. Estaban esperando dentro del vestuario con látigos. Gente entrenada".
Fuente: www.ole.com.ar

"Tienen que ir presos"


Sergio Massa, presi de Tigre, pidió responsables por las agresiones y dijo que la AFA "debe hacer una fuerte protesta". Explicó los pormenores del vestuario y cerró: "Es una de las páginas más vergonzosas del fútbol brasileño".

El final de la Copa Sudamericana fue un bochorno. San Pablo resultó ganador luego de que Tigre se negara a disputar el ST, tras ser golpeador por la policía local. Sergio Massa, presidente del Matador, pidió que haya consecuencias: “No nos gusta ganar o perder un partido en los escritorios pero la AFA va a tener que hacer una fuerte protesta. San Pablo será muy grande pero como anfitrión es desastroso. Los responsables tienen que estar presos”.
Massa continuó, explicando las varias agresiones que sufrió el plantel de Tigre: “Es una de las páginas más vergonzosas del fútbol brasileño. Vinimos a jugar un partido, no una guerra… Se tuvieron que comer un arma de fuego en el pecho, hay jugadores con puntos de sutura…”, amplió el presidente.
Por último, explicó qué fue lo que hizo demorar la decisión de concluir el partido: “Los jugadores tomaron la decisión de no entrar a jugar el ST, nosotros decidimos que los íbamos a respetar y a acompañar. Esperamos porque queríamos garantizarnos q salieran los hinchas argentinos de las tribunas”, cerró Massa.
Fuente: www.ole.com.ar

"Nos pegaron con todo"


Galmarini, con el brazo cosido, relató la pesadilla y el ataque que sufrió Tigre en el vestuario. “Nos cagaron a palos, con bancos y hasta con bastones de la Policía”, contó.

En el vestuario visitante se percibe la angustia y la rabia por los incidentes en el entretiempo. Martín Galmarini, con el brazo lastimado por los golpes, relata lo que ocurrió...
-¿Te cosieron el brazo?
-Sí. ¡Nos cagaron a palos! Nos estaban esperando.Esto es la consecuencia de lo que nos hicieron desde que llegamos. Nos pegaron con bancos, con un bastón que se alarga de la Policía... Había 15 tipos preparados para cagarnos a palos. ¡Estaba todo armado! No tuve miedo, pero fue un momento horrible, mi desesperación estaba porque mi familia estaba en la tribuna, como las familias de mis compañeros. Y si acá tuvimos zona liberada, no sabía qué podía pasar en la tribuna.
-¿Qué pasó?
-Cuando vinimos al estadio, nos rompieron todos los vidrios del micro, nos tiraron botellas de cerveza, piedras... Más tarde, no nos dejaron hacer la entrada en calor, nos prepotearon... ¡Vino gente de la Confederación a empujarnos para que no termináramos la entrada en calor! No le encuentro sentido, no lo encuentro, te lo juro. Quería jugar esta final, salir campeón o subcampéon, pero jugando, en la cancha. Siento la bronca, la tristeza y la congoja de lo que pasó. Me siento mal, no esperábamos esto, que nos pegaran en el vestuario... Nosotros a ellos los tratamos de mil maravillas en Buenos Aires. Acá nos maltrataron desde que vinimos a Brasil. No nos dejaron ni pisar el Morumbí... Después, nuestras familias esperando hasta 10 minutos antes del partido para que les den las entradas... Fue todo muy triste.
-¿Lo esperaban?
-Un futbolista argentino que juega en Brasil me había dicho que iba a pasar esto acá. Mirá, siempre hay que sufrir cuando sos visitante, y sabíamos que Brasil era difícil, pero lo que pasó, no se entiende...
-¿El árbitro fue al vestuario antes de dar por terminado el partido?
-El arbitro entró 15 minutos tarde, cuando ya había pasado todo, cuando ya nos habían cagado a palos, cuando ya nos habían amenazado con un fierro (un arma). Que venga un señor de la Confederación y me diga “capitán, el que apuntó con un arma ya está detenido”, ya no sirve de nada...
-¿Te comunicaron que estaba preso?
-Me dijeron eso... No le creo... ¡Mentira! ¡Qué va a estar detenido! Debe estar festejando!
-Los jugadores del San Pablo dijeron que Tigre salió a pegar...
-Que digan lo que quieran. Salvo alguna que otra trabada, algún que otro manoseo, no hubo mucho más. Lo otro fue una locura.
San Pablo (enviado).
Fuente: www.ole.com.ar