En los primeros minutos, el equipo de Gorosito bombardeó el área de Fernando Prass con centros que llovían tanto del sector derecho como del izquierdo. Pero la potencia en el juego aéreo no pudo ser aprovechada por los de Victoria y el Palmeiras contrarrestó sus ataques con disparos lejanos de Vinicius y Henrique.
Sobre los treinta minutos de la primera etapa se produjo la situación más clara hasta el momento: luego de un córner ejecutado por Rusculleda, Lucas Orban peinó la pelota hacia el vértice del área chica y el arquero brasileño de un modo muy poco ortodoxo, pero sumamente eficaz, despejó con los pies y, haciendo rebotar la pelota en Echeverría, consiguió salvar su arco.
En la pelota parada parecía que se encontraba la llave del gol. El equipo paulista tuvo su posibilidad tras un tiro libre muy bien pateado por Wesley. Con un tiro rasante, esquinado y venenoso, la visita pudo abrir el marcador, pero el juvenil Agustín Cousillas respondió de forma extraordinaria para mantener el cero, y las redes se fueron vírgenes al vestuario.
En el complemento el Palmeiras le perdió el respeto al “Matador” y salió a atacarlo con más gente en ofensiva, tilizando constantemente a sus laterales. La movilidad de Vinicius y la potencia de Kléber preocupaban demasiado a un equipo que a medida que pasaba el tiempo se deslucía cada vez más.
La impotencia en los dirigidos por Gorosito llevaba a una actitud cada vez más violenta en las pelotas divididas. Los nervios de Galmarini, Leguizamón y Ferreira estuvieron a punto de dejar a su equipo en inferioridad numérica, ya que en más de una ocasión pegaron más de la cuenta y no fueron expulsados porque el ecuatoriano Omar Ponce no estuvo a la altura en el arbitraje del encuentro.
El ingreso de Patrick Vieira le dio mayor peso ofensivo al elenco de Gilson. El homónimo del jugador francés tuvo en sus pies el gol de la victoria, pero Agustín Cousillas se lo negó con una tapada extraordinaria. El tercer arquero de Tigre fue uno de los pocos que tuvo una tarea destacable en un partido en el que las figuras dijeron ausente.
El partido se terminaba y la resignación ya era un hecho en el Monumental de Victoria. Sin embargo, en la última bola de la noche Gabriel Peñalba hizo rugir a un Tigre que estaba agonizando. Luego de un tiro libre ejecutado por Botta, Mariano Echeverría consiguió asistir al ex Argentinos y éste le rompió el arco a Prass para hacer delirar a toda la parcialidad local: 1 a 0. Ha vuelto el Matador.
Así, con una muy pobre producción futbolística, los conducidos por Gorosito sumaron sus primeros tres puntos en el Grupo 2 y continúan con vida en la Copa, ya que alcanzaron al Palmeiras, y sólo se encuentran a una unidad del Sporting Cristal que suma cuatro. En tanto, el líder de la zona, Libertad, acumula siete.
Síntesis:
Cancha: Tigre.
Árbitro: Omar Ponce (Ecuador).
Tigre: Agustín Cousillas; Alejandro Donatti, Mariano Echeverría y Lucas Orban; Martín Galmarini, Gabriel Peñalba, Diego Cisterna y Sebastián Rusculleda; Matías Pérez García; Leandro Leguizamón y Federico Santander. DT: Néstor Gorosito.
Palmeiras: Fernando Prass; Weldinho, Mauricio Ramos, Henrique, Marcelo Olivera; Vilson, Marcio Araujo, Jorge Valdivia, Wesley; Patrick Vieira y Vinicius. DT: Gilson Kelina.
Cambios en el segundo tiempo: 13m, Lucas Janson por Pérez García (T) y Leandro Leguizamón por Santander (T); 17m, Maikon Leite por Vinicius (P); 29m, Agustín Torassa por Rusculleda (T); 30m, Patrick Vieyra por Wesley (P) y 38m, Charles por Leite (P).
Fuente: www.playfutbol.infobae.com
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